Bastante a menudo somos consultados por personas que se encuentran encarando un cambio importante en sus actividades habituales, como ser: Emprendedores que comienzan a gestionar personal en su emprendimiento; Ejecutivos que asumen funciones en donde sus decisiones toman una dimensión decisivamente mayor a la que estaban acostumbrados ; y Empresarios que encaran el crecimiento de sus organizaciones.
Todos estos casos presentan un denominador común, la ansiedad por hacerlo bien y ser efectivos, y el no administrar esta ansiedad, apresurarse en las acciones pueden llevarlos a cometer errores que podrían ser evitados.
Por esta razón, les acercamos algunos puntos a tener en cuenta:
• Ser reflexivos ante la realidad que van a enfrentar, esto significa observar, escuchar, comparar y analizar el contexto antes de proceder a actuar.
• Tener en claro cual ha de ser la visión, hacia donde voy a proyectarme o proyectar la empresa.
• Constituir con sus mandos medios o grupo de especialistas un equipo, verdaderamente imbuido de esta visión, dispuesto a hacerla realidad, actuando en consenso.
• Aplicar la escucha activa, recorrer la empresa, de existir aéreas en contacto directo con el cliente, acompañarlos, ver y escuchar lo que ocurre en esos contactos.
• Transmitir en el día a día lo que espera de cada uno de sus colaboradores, facilitándoles los elementos necesarios para que logren los objetivos.
• Alentar al mando medio a realizar las acciones de instruir al personal, ver las mejoras operativas que puedan realizarse y constituirse en transmisores de la visión central.
• No todo debe ser comunicado a todos, hay momentos adecuados para hacerlo y esto debe estar consensuado con el equipo directivo.
• Hacer de la comunicación, algo habitual y cuando sea necesario , y solo en ese momento, darle un formato mas protocolar
Parece simple, no? Y lo es. Solo que requiere el trabajo diario de ir construyendo el paradigma que uno desea. .
Estamos a su disposición para ayudarlos, póngase en contacto.
Lic. Daniel Velinsone